Roboayudantes espaciales
Las reparaciones en el exterior de las naves y estaciones orbitales son uno de los cometidos más penosos y arriesgados con los que tienen que lidiar los astronautas. Ahora, la NASA ultima el desarrollo de una nueva generación de robots asistentes denominados LEMUR II –acrónimo de Limbed Excursion Mechanical Utility Robot– que serán los encargados de llevar a cabo algunas de las tareas de mantenimiento más delicadas.
Estas máquinas de forma vagamente arácnida pueden moverse de forma autónoma e inspeccionar por sí solas posibles averías mediante dos cámaras estéreo que les otorgan un ángulo de visión de 360 grados. Además, están equipadas con un diodo emisor de luz superbrillante capaz de iluminar el área alrededor suyo y sus miembros articulados poseen puntos de anclaje para que los astronautas coloquen herramientas. Así las cosas, no es extraño que en el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la agencia espacial estadounidense, donde se están poniendo a punto, ya se les considere una especie de navaja espacial multiusos. Algunas versiones de estos ingenios, como el LEMUR IIa, pueden incluso utilizarse para construir estructuras en gravedad 0, como un telescopio orbital. El LEMUR IIb, por su parte, ha sido diseñado para colarse por grietas en la superficie de un planeta, trepar por desniveles y acantilados, perforar rocas con un taladro sónico y tomar muestras.